La ambición suele hacer traidores 

Cristina de Suecia 

El pasado miércoles una férrea oposición integrada por senadores de los partidos PRI-PAN-PRD-MC y del Grupo Independiente, demostró que anteponiendo los intereses personales, de grupo en favor de México y de millones de mexicanos, enfrentó y venció a una desarticulada y dividida bancada de Morena, que ahora se sabe que no es invencible. Ante la falta de votos necesarios para aprobar el dictamen al quinto transitorio, frenaron de tajo la militarización del país que López Obrador pretende para garantizar la continuidad de un fallido gobierno que tiene hinojos a millones de mexicanos.

En este ejercicio legislativo quedó de manifiesto quiénes están en favor de México y a los postrados ante el poder de quien conoce su largo historial de corrupción por decir lo menos, que los ha llevado a cambio de impunidad a traicionar la representación y responsabilidad que confiados ciudadanos les confirieron en las urnas. El posicionamiento de cada uno de estos dio cuenta de una añeja podredumbre guardada durante años que amenazó con llevarlos ante la justicia. La obviedad de su culpabilidad en actos delincuenciales se reflejó en sus posiciones en tribuna.

Durante la sesión del pasado miércoles en el Senado de la República quedó de manifiesto que aún quedan mujeres y hombres con convicción, que salieron en defensa de millones de mexicanos, en contraste con aquellos que asumieron la defensa de la militarización de México, exhibiendo su temor a ser llevados al cadalso que López Obrador ordenó para extorsionarlos, a cambio de no someterlos ante jueces a modo que irremediablemente los enviarían a prisión, además de despojarlos de la riqueza y bienes ilícitamente obtenidos.

Morena resultó más frágil de lo que imaginábamos. Sin embargo, cantar victoria sería infantil; los secuaces de López Obrador seguirán desenterrando expedientes guardados para estas coyunturas ad hoc para coaccionar a quienes se oponen a terminar de permitir la destrucción de este gran país. 

Lo positivo, ya se vio una luz al final de túnel que seguramente terminará convirtiéndose en una llama que incendiará los secos pastizales de millones mexicanos agraviados por la llamada Cuarta Transformación, y quizás, el inicio de una gran insurgencia ciudadana que cimiente el sinuoso camino hacia la elección del 2024. 

La ambición suele hacer traidores