Acción Nacional eterno cómplice de la corrupción

Con el arribo de Noemí Luna Ayala a la dirigencia estatal del PAN, impuesta por su decadente protector, el eterno parlamentario José Isabel “Chabelo” Trejo, mejor conocido en el bajo mundo de los moches cómo #LordRamo23, el partido político mejor posicionado en el contexto nacional después de Morena, sucumbe a sospechosos, pero evidentes acuerdos con los gobiernos en turno.

El pasado lunes 2 del mes y año en curso, Luna Ayala convocó a conferencia de prensa, que por cierto, intentó sin éxito convertir en monólogo, para fijar la postura de su partido inherente al I Informe de Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, bueno, no, cómo Tercer Informe.

La dirigente albiazul criticó la crisis en salud por desabasto de medicinas; la falta de crecimiento de la economía, el incremento del desempleo; el año más violento en la historia de México; el dispendio de recursos con la creación de clientelas electorales, y cerró con excelsa perla, “que hay incongruencia en el combate a la corrupción y nepotismo” (¡!)

En la recta final del sexenio trágico de Miguel y Juan Alonso, siendo presidenta por vez primera del ComitéDirectivo Estatal de Acción Nacional en Zacatecas, Noemí Luna Ayala optó por la negociación con el exgobernador y guardó conveniente silencio ante la aviesa y pública corrupción que hoy más de 1.2 millones de zacatecanos tienen que pagar sin deberla.

Con el gobierno de Alejandro Tello, vuelve a adoptar la misma actitud, dejando correr las cosas, siendo omisa ante abusos, y corrupción que el gobernador ha reconocido en su gobierno, y que asegura “no meterá las manos por nadie”, y no se diga el desempleo, crisis económica, violencia, inseguridad, etc. 

Sospechoso el silencio de la renovada presidenta del PAN, cuando la Secretaría de la Función Pública Federal (SFP), hoy reclama al estado de Zacatecas que regrese más de 2 mil millones de pesos a la tesorería de la Federación, debido a irregularidades en el gasto sólo superadas por los desvíos de Javier Duarte en Veracruz y los de Nuevo León según nota del diario NTR.

Se trata de anomalías en el ejercicio de recursos públicos durante la última mitad del mandato de Miguel Alonso Reyes y los primeros dos años del actual gobernador, Alejandro Tello Cristerna, ambos representantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Por si esto no fuera suficiente, la cúpula empresarial, mayoritariamente panista, le restriega en el rostro a Luna Ayala su pública omisión y por la libre exigen cuentas claras a la Fiscalía General del Estado, en cuanto al “combate” corrupción y consignaciones se refiere. 

Alejandro Enríquez Suárez del Real, representante de las cámaras acusó a los Sistemas Anticorrupción y a las autoridades de manejarse en la opacidad, sin informar realmente si habrá sanción para quienes hayan incurrido en actos de corrupción.

No cabe duda que sólo Marko Cortés dirigente nacional del PAN, e ingenuos panistas zacatecanos todavía creen en Noemí Luna, quien vive más preocupada por obtener recursos para el pago de la cara, carísima nómina de sus más allegados, a tal grado que ordenó la venta de un terreno propiedad del PAN rematado en la suma de 600 mil pesos para poder pagarla, por lo que el Instituto Nacional Electoral (INE) multó al partido con 1.2 millones de pesos, por esta venta.

Pobre panismo, las dos franquicias están terminando de sepultarlo…