Los profes carne de cañón del poder

Con gratitud a mis maestros 

En México los profesores desde hace casi un siglo han sido utilizados como carne de cañón del gobierno y gobernantes, siempre negándoles la importancia de su participación en el desarrollo y progreso del país, relegándolos a simples peones de un ajedrez en favor de sus particulares intereses. 

En el México contemporáneo, desde Carlos Jongitud Barrios con la  “Vanguardia Revolucionaria del Magisterio” apéndices de viejo PRI, hasta  Elba Esther Gordillo Morales, por mencionar algunos, hicieron del magisterio, del SNTE un multimillonario negocio a costa de las cuotas sindicales, además de convertir al sindicato en un instrumento al servicio del presidente en turno.

Las cosas no han cambiado con el gobierno de López Obrador. Los profesores siguen padeciendo el cacicazgo de su dirigencia nacional, de los líderes seccionales que siguen utilizándolos como sus operadores políticos para encumbrarse en espacios legislativos y de gobiernos, como el caso de Raúl Morón Orozco en Michoacán, entre muchos.

Aún más, en la actualidad miles de maestros padecen las de Caín ante la negativa de gobiernos estatales para pagar sus salarios, pero sobre todo sus prestaciones, las que en algunos casos, corruptos políticos consideran “exorbitantes”, pues seguramente sólo ellos deben tener el privilegio de vivir desahogadamente, pero no quienes educan e instruyen a sus hijos. 

Presidentes de México, gobernadores, alcaldes y en sí toda la fauna política, han y sigue utilizando a los maestros para construir sus imperios, sus capitales políticos siempre en su beneficio y de sus respectivos grupos políticos; los maestros han sido perseguidos, encarcelados y desaparecidos por consignas que provienen de las cúpulas del poder, sin que hasta la fecha haya una voz que salga en su defensa.

Todos aquellos que han y siguen utilizando a los profesores para sus cometidos personales, demuestran que la educación les vale madres, a pesar que los profes son los responsables de guiar desde preescolar hasta la educación media a nuestros hijos, que sin esta educación básica no hay futuro para ninguna generación sin importar el lugar y época.

Quien hoy desprecia al maestro, no tiene madre…