Vox populi: Ricardo se equivocó de hermano

La voz del pueblo es la voz de Dios 

Lord Weymouth  

La hipocresía de la mal llamada clase política, y el justificado temor del pueblo, no se atreven, pero en corto, en secreto, despotrican y culpan al senador Ricardo Monreal de haber impuesto a sangre y fuego a su hermano David para que gobernara Zacatecas, con excepción de muy contados amigos del senador.

Desde un exclusivo club de golf en Zacatecas, hasta el más modesto hogar, pasando por los pasillos de Palacio de Gobierno, partidos políticos y hasta al interior de Morena, culpan al titular de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, de haber elegido al hermano con menos capacidades y con más fobias que ninguno.

En uno de los momentos más álgidos para el aspirante a la candidatura presidencial en el proceso electoral del 2024, cuando desde Palacio Nacional y la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, enderezan intensa campaña de descalificación a quien hasta el momento le sigue siendo útil al presidente López Obrador, el mayoritario rechazo a su hermano contamina sus aspiraciones, negarlo sería iluso.

Los silenciosos reclamos al senador, son sustentados no solo en la lentitud de su hermano David para asumir el cargo, siempre dependiente de féminas voces ajenas al Poder Ejecutivo, sino principalmente que más de un mes de haber aceptado la investidura no gobierna, no ha dado a conocer la carta de navegación para Zacatecas, concretándose a exhibir el saqueo de las arcas públicas, solo eso.

En el estado para nadie, tampoco para el gobernador, era un secreto el quebranto financiero que dejó el “gobierno diferente”. Desde el más modesto trabajador, hasta el más encumbrado empresario tuvieron conocimiento de la grave crisis, confirmada por la mensual mendicidad del exgobernador Alejandro Tello a las puertas de la Secretaría de Hacienda; los quebrantos y la miseria son imposibles de ocultar. 

La hipocresía política y empresarial tienen su razón de ser. Ambos sectores sociales encienden una nueva veladora al Santo Niño de Atocha para que el senador Ricardo Monreal alcance la Presidencia de la República. Los primeros, aspiran a cargos en el gabinete, los segundos en esperan la llega de pingües negocios a sus empresas, por eso callan, pero en secreto en sus círculos sociales no dejan de culpar al candidato al 2024 del prematuro fracaso del gobierno de Zacatecas.

En el pecado lleva la penitencia…