Cuando el gobierno viola los derechos del pueblo, la insurrección es el más sagrado de los derechos y el más indispensable de los deberes 

Marqués de La Fayette

Cuando un presidente asume que está moralmente derrotado, acude a la violación sistemática de las leyes para suplirlas con otras a modo, siempre en busca de perpetuarse en el poder, y así poder garantizar la necesaria impunidad para él, su familia y para sus cómplices, es señal inequívoca que el país no tiene futuro, sólo los intereses del fracasado dictador. 

El presidente Andrés Manuel López Obrador, el pasado martes propuso una reforma para que "el pueblo" elija de forma directa a los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y a los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). 

“Voy a proponer que sea el pueblo el que elija a los consejeros electorales y a los magistrados de manera directa con voto abierto. El pueblo va a elegir de forma directa. Se acabó, o espero que se acabe, lo de los acuerdos cupulares contrarios al interés del pueblo”. El presidente elegirá quién representarán al pueblen el caso que prospere su iniciativa electoral. 

El linchamiento impulsado, promovido por el presidente en contra de del Instituto Nacional Electora (INE), y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), es el preludio de una avanzada en contra de todo organismo e institución que impida prolongue 2 o 6 años más su gobierno, para regocijo de los bloque latinoamericano “socialista”, que López Obrador generosamente alimenta con cientos de millones de dólares de los contribuyentes mexicanos.

El hambre, miseria, desempleo, un sistema de salud colapsado, la corrupción familiar del presidente, de sus colaboradores, y la violencia entre otros factores, reflejados en la abrupta caída en las preferencia del presidente, apuntan a un inminente levantamiento ciudadano ante la pretensión presidencial de perpetuarse en el poder con el apoyo del ejército, insurrección que está siendo alimentada por empresarios, políticos, incluyendo de Morena, y cárteles que no gozan de la protección del Estado mexicano. 

A este respecto, no se debe pasar por alto las múltiples “visitas” a Palacio Nacional de funcionarios de alto nivel del gobierno de Estados Unidos, que incluyen a la vicepresidenta Kamala Harris y el embajador Ken Salazar entre otros, durante las cuales han abordado además de temas de la iniciativa de Energía Eléctrica, inseguridad, violencia, corrupción, que también incluyó la posibilidad de un estallido social que pondría en riesgo la seguridad nacional de su país, que para ser francos es lo único que interesa al gobierno de Joe Biden.

Las preocupaciones del diplomático norteamericanos tienen sustento en un documento (Mexico Background and U.S. Relations) presentado el 21 de marzo del 2022 ante el Congreso de los Estados Unidos, en que aborda la corrupción de la familia del presidente, su caída en las preferencias, la campaña en contra del INE, la protección del exsecretario de la Sedena Salvador Cienfuegos acusado de narcotráfico y aprehendido en suelo estadounidense, la corrupción gubernamental, el tráfico de opioides,  metanfetaminas, marihuana, y la creciente irritación popular, empresarial y de cárteles que no gozan de protección del Estado mexicano. 

Preludio, terminas y te vas…

Información recabada de: Mexico: Background and U.S. Relations. Congressional Research Service. March 21 2022. Washington D.C.