Charrismo sindical

La masa busca al líder, no porque lo estime sino por interés; y el líder acepta a la masa por vanidad o por necesidad 

Napoleón Bonaparte

Norma Castorena Berrelleza, secretaria general del SNTSA Sección 39, en el estado de Zacatecas, perpetrada por más de 12 años en la secretaría general, pretende engañar a sus agremiados bajo el argumento que defenderá las plazas que les corresponde en el Hospital de la Mujer de Fresnillo, cuando en realidad el IMSS-Bienestar está obligado a respetar sus derechos laborales y migrarlos a la nómina federal, toda vez que el gobierno de López Obrador se agandalló el hospital construido y equipado con recursos de la Secretaría de Salud del gobierno de Zacatecas, y por ley el IMSS respetará sus derechos, antigüedad, etc.  

Si con la misma virulencia Castorena Berrelleza hubiera defendido a los 480 médicos dados de baja después de haber estado al frente en diferentes hospitales durante la pandemia del Covid 19, en la que perdieron la vida 22 médicos, y una decena de personal sanitario, el desabasto de medicamentos e insumos, y los raquíticos salarios durante el quinquenio de Alejandro Tello, se justificaría esta nueva “defensa” de las plazas del Hospital de la Mujer en Fresnillo. La líder sindical nada hizo por los médicos y personal sanitario, en acuerdos con el gobernador en turno  y su cónyuge la Dra. Cristina Rodríguez. 

Dr igual forma, durante el gobierno de Miguel Alonso Reyes la líder sindical se dedicó al proselitismo, y acomodar sus primeros incondicionales y familiares en las plazas que dispuso el gobierno de Zacatecas, debido a que el Dr. Raúl Estrada Day secretario de Salud dotó de tecnología e insumos suficientes a los hospitales como la fueron: la adquisición de un acelerador lineal para tratamiento cáncer, robots para consultas de sub especialidades en el estado y centro de salud comunitarios, más de100 ambulancias, equipo de resonancia magnética de última generación, tomógrafos, y lo más importante, un abasto de medicamentos del 90%, etc., por lo que el sistema de salud estatal caminaba sobre ruedas y los trabajadores no tenían problemas, ni quejas.

Sin embargo, Norma Castorena se tiró a los brazos de la Dra. Cristina Rodríguez Pacheco, no Acevedo, aclaro, dejando en manos de la doctora el sistema estatal de salud, en el que el desabasto de medicamentos, insumos, los raquíticos salarios a médicos, trabajadores, fue la constante, e hizo caso omiso a las denuncias contra el Dr. Felipe Escalera López director del Hospital General, por su autoritarismo, y prepotencia en contra de médicos y personal sanitario, además de despojar de las plazas al personal médico de contrato que había laborando ininterrumpidamente desde 1 hasta a los 10 años, entregándoselas a sus incondicionales en busca de una nueva reelección en el cargo sindical. 

Castorena Berrelleza convocó obligatoriamente y  bajo amenazas a una marcha al personal médico para “defender” las plazas de los trabajadores en el Hospital de la Mujer de Fresnillo que será administrado bajo el nuevo esquema de IMSS-Bienestar. Si bien la demanda parece justa, las intenciones de la líder sindical es defender las plazas que otorgó a su arbitrio dejando sin oportunidad a trabajadores que tenían derecho, como parte de su estrategia para obtener votos en su nueva aventura de alcanzar una curul en el 2024 bajo la siglas del PRI. 

La virulenta y grotesca marcha e contra del Dr. Oswaldo Pinedo Barrios Secretaría de Salud de Zacatecas, quien simultáneamente se despeña como delegado estatal del IMSS, obedece al dolo de la líder que engaña a los trabajadores asegurando que perderán sus plazas ante la incorporación al Programa IMSS-Bienestar, consciente que nada de esto sucederá; aunque destituyeran al secretario de Salud, nada cambiará, el decreto fue firmado y publicado por el presidente López Obrador, y todos sabemos que no habrá marcha atrás, mucho menos cuando el Hospital de la Mujer le salió gratis al presidente.

Norma Castorena está resentida con el gobernador David Monreal desde la campaña electoral cuando aspiró a la diputación federal por el distrito I de Fresnillo, lo buscó y no la recibió, bueno, ni un mensaje le respondió. Y ahora pretende convertirse en mártir y redentora precisamente en Fresnillo para volver a contender por una diputación local en el 2024, convenciendo a tirios y troyanos que defiende los derechos de sus agremiados, cuando en realidad defiende su capital político. Basta mencionar el ridículo que hizo la líder sindical cuando apaleó una piñata, o botarga que mandó fabricar con la imagen del secretario de salud, dejando en claro su nivel “político” que sería envidia de Layda Sansores San Román, gobernadora de Campeche.

La señora Castorena debe aprender, sino por lo menos imitar el liderazgo de Carlos Pavón Campos secretario general del Sindicato Minero Frente, en el que sus agremiados son los mejor pagados de Zacatecas, que tiene mejores prestaciones, equipos de trabajo, seguridad laboral, capacitación, etc., y que ahora el líder defiende el derecho constitucional al reparto de utilidades de sus agremiados, debido a que la iniciativa de marras que envió el presidente al Congreso de la Unión, terminó despojándolos de ese derecho. Cuando es líder se nota, cuando es vividor del esfuerzo de los trabajadores también se nota, aunque se pretenda esbozar con un falso apostolado.

De continuar con la farsa de la defensa de los derechos de sus agremiados en el Hospital de la Mujer en Fresnillo, la líder sindical se está arriesgando a una profunda investigación de sus bienes y propiedades, además de sinnúmero de denuncias por presunto tráfico de influencias y venta de plazas, que sus detractores recopilan y documentan con avidez y que están en espera de terminar para entregarlas a quien corresponda del gobierno de Zacatecas para actuar en consecuencia, pasándole la factura a Castorena Berrelleza por sus abusos y corrupción, entregando su cabeza en “charola de plata” a David Monreal.

Tiene derecho de réplica…