Los niños eternas víctimas de políticos

A los niños  

Miserables, hombres y mujeres detentores temporales del poder que se asumen cómo víctimas de un sistema político que hicieron a su imagen y semejanza, de sus adversarios políticos, de las tempestades que a su paso han sembrado, cuando en realidad son ellos que con sus ambiciones y acciones matan, sepultan sueños e ilusiones millones de niños sin siquiera inmutarse, convirtiéndose de facto en dueños de sus vidas, y por supuesto en sus verdugos, literalmente hablando.

Políticos con sus contadas excepciones, sin importar colores e ideologías, han transitado por la pasarela del poder tomando decisiones en nombre del pueblo, que han llevado a la miseria a millones de padres de familia y sus hijos, llevándolos de la mano a la migración forzada, a la desnutrición, a la muerte por violencia, por inanición, por la carencia de servicios médicos, y medicamentos, además de orillarlos a la mendicidad que finalmente termina en la explotación y abuso de cientos de miles de niños a manos de enfermos mentales, psicópatas, y delincuentes sin que los políticos siquiera se inmuten.

Jamás los políticos han tomado en cuenta a los niños en sus personales proyectos-que no de gobierno-por la sencilla razón que en sus entornos familiares, sus hijos, sólo reciben dinero sin límite, y satisfactores en demasía, en la mayoría de los casos, negados del amor y atención de sus padres que privilegian la política y reuniones sociales, sin percatarse siquiera que no han forjado mujeres y hombres de bien, productivos, responsables, sino hijos abandonados, dejados a cargo de servidumbres y guardaespaldas, pero sobre todo inútiles a la sociedad y eternos dependientes de las ubres del erario.

Cómo va a importarles la vida y suerte de millones de niños, hijos de ciudadanos de a pie, que desde su nacimiento son víctimas del oprobioso regateo del Estado de sus derechos, sino les importan los suyos. Los niños sin distingo de su condición social, religión, etc., tejen miles, millones de sueños, sus mentes vuelan por mundos ideales en los que se ven convertidos en médicos, bomberos, astronautas, y hasta héroes de películas, sin siquiera intuir que no llegarán a cristalizarse debido a una fauna política hambreada y corrupta.

Desde este espacio reprobamos, rechazamos los vergonzosos espectáculos montados con recursos públicos, faltaba más…por voraces políticos, cada día más hambreados de poder, del erario, de turbios negocios, y que a la fecha no terminan de llenar, los que se victimizan una y otra vez, acusando con el dedo flamígero a sus enemigos de la arena política que los quieren ver derrotados en su propio lodazal, mientras esto sucede, dejan a su suerte millones de niños que sí son víctimas de su ambición de poder, que han matado, sepultado sus sueños e ilusiones de un plumazo.

Los niños letra muerta para los políticos