Populismo para chairos en 3 lecciones

III y último- Y pongo otro ejemplo: Hoy en el año 2022, la gran mayoría de todos los cubanos que han llegado en la última década al exilio, lo hacen a imagen y semejanza de Fidel y salvo contadas excepciones, son generaciones acostumbrada a que le hagan y le den todo y lo peor de todo es que han sido educados para recibir todo gratis, sin trabajar, sin esfuerzos. 

Todo gira alrededor de la “ayuda”, claman desesperadamente buscando las “food stamps” y el Medicaid, dos programas subvencionados por el gobierno. Son generaciones que no quieren trabajar en cualquier cosa. ¡Qué va, man! ¡Yo no puedo ensuciarme de grasa! Y los ves bien vestidos, elegantes con sus gafas estilo Matojo, hablando todo el tiempo por el celular, que, dicho sea de paso, también lo subvenciona el gobierno y pensando en cómo volver a la isla en cuanto le den el “green card”, llenos de pacotilla para poder especular de las maravillas del exilio y de ese imperio del que tanto se quejan. 

Es la generación que vive con el cuerpo en el exilio y la mente en Cuba. Es la generación que le crece la panza en el exilio, pero se quejan de lo caro que es todo en este despiadado capitalismo que nos explota y nos somete al proletariado, pero eso sí, forjados en la doble y hasta triple moral inculcada por la Dictadura que les permite vivir del cuento si es que sus mente les da la posibilidad de escribirse su propio cuento. 

Amigos, esa es nuestra historia. Nuestra triste historia simplificada en una pocas cuartillas, que podría cambiar a un lindo argumento si empezamos a escribir nuestra propio guion con base en una historia bien contada. 

Tenemos que deshacernos de castrismo que llevamos tatuados en nuestro ADN, si en verdad queremos ver a una Cuba libre, pero me atrevo a decir algo más general… si queremos ver a una América Latina libre de todo el mal que nos han hecho. Tenemos que empezar a ser mejores personas, a ser una comunidad unida, trabajadora, y digna de haber recuperado nuestra autentica cubanía e identidad. Si no empezamos por ahí, Cuba jamás será libre.  

Lo más triste de todo esto es que no somos solos los cubanos, la gran epidemia del socialismo del siglo XXI es una realidad permeando al continente. Nicaragua, Venezuela, Ecuador, Bolivia, Argentina, Chile y ahora México. Idealistas trasnochados de izquierda que aún no despiertan o intentan despertar en esos años, donde el régimen cubano vendió al continente sus mejores años de esplendor socialista. Pero todo fue una mentira. 

Nunca hubo años de esplendor socialista en Cuba. Todo fue una mentira que escondía una época triste, gris y sangrienta para el pueblo cubano. Pero vendieron la mentira tan disfrazada, que todos querían ser como Cuba, pero lo único que sabían de Cuba es que había Educación y Salud Gratis. Y hasta eso era mentira. 

Nunca fue gratis. Solo fue una moneda de cambio y objeto de chantaje. No te quejes, no protestes y no te manifiestes, porque tienes Educación y Salud gratis. Cuba es el único país donde existe…En ningún lugar de América lo hay. Ni en los Estados Unidos… 

Y así les creímos las mentiras. Cuando estuve en México en los años 90’s pude comprobar con mis propios ojos que la educación era pública al igual que la salud. Y también pude comprobar que el mexicano no valoraba ese país maravilloso que tenían. Un día le dije a un amigo, idealista y medio socialista que conocí en esa época: 

Amigo, ustedes van a aprender a valorar este México que tienen, el día que lo pierdan...