David Monreal, o el fracaso del apellido

En opinión del Dr. Jesús Corona Osornio.- David hermano de Ricardo, es un Monreal atípico, destacado por su poca capacidad intelectual, a diferencia de su hermano, que, sin ser un genio, tiene sin duda, dos dedos más de frente.

David como Gobernador de Zacatecas, no ha logrado demostrar ninguna capacidad de gobierno, ninguna capacidad administrativa, ninguna capacidad política; David no tiene idea de cómo darle rumbo a su Estado sobrevive gracias al secretario de Fianzas. 

Ricardo que fuera gobernador de ése mismo estado, por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en aquellos años al igual que hoy Morena, sin pudor, ni ética, recibía en sus filas a cualquier persona, sin importar que hasta un par de horas antes, fuera militante de otro partido.

Emberrinchado porque el Partido Revolucionario Institucional no lo hiciera su candidato, Ricardo se fue al PRD dirigido por López Obrador. Ideológicamente de centro, en horas se tornó en izquierdista, la izquierda que desde su curul combatía con denuedo.

El diputado Monreal pronto fue candidato y luego un regular gobernador, de un estado cuyas carencias eran notorias, y que al termino de su mandato, estaban igual o peores. Ricardo siempre ha estado bajo sospecha de corrupción, sus hermanos tuvieron un crecimiento exponencial bajo su gobierno.

David no ganó, fue la imagen del ciudadano de palacio, las siglas de Morena, ganó por inercia, los Monreal como hace más de una década ya no son bien recibidos en todo Zacatecas.

Ricardo Monreal hoy viste el traje de ideólogo, líder, y vaya usted a saber cuántas cosas más, es decir, hoy Monreal vende la imagen de monaguillo de la política, el doctor Ricardo cree que por ser senador y tapa rosca de López Obrador, ya tiene el aura de santón y perdió las sospechas de corrupción sembradas en su pésimo paso por la Cuauhtémoc, y que vienen también de cuando fuera Gobernador.

David Monreal lejos de gobernar, se la vive encerrado en su despacho, sus participaciones públicas dejan mucho que desear, desaseado políticamente, torpe ante los medios, y aún más torpe ante sus gobernados.

El gobernador Monreal, tiene calificaciones muy bajas, derivado de la inseguridad, cuyo combate ha dejado totalmente en manos del gobierno federal, que si bien, el narcotráfico es responsabilidad de la Federación, también es cierto que a David nada le importa lo que pase con la policía estatal, que sí es su responsabilidad.

La crisis por inseguridad que se vive en Zacatecas es un cáncer ya en metástasis que no sanará con la llegada de generales, tropa y Guardia Nacional, no cambiará porque no se combate la causa de origen.

La falta de inversión productiva en la entidad y la salida hacía EEUU de cientos de miles de zacatecanos y ahora en crecimiento exponencial de mujeres, que buscan, allende las fronteras, mejor calidad de vida, hacen que la economía tenga cifras rojas de poco crecimiento, amén de la parálisis del gobierno monrealista.

Zacatecas ha enfrentado desde la época de Amalia García, cuyo gobierno nepotista y corrupto sumió al estado en la más profunda crisis, solo superada hoy por la actual administración.

Zacatecas es hoy ejemplo de fracaso, de mala administración, de inseguridad, de ausencia de gobierno. Los Monreal, como dice el dicho: la mona, aunque se vista de seda, mona se queda. Y aunque Ricardo se cabreé porque no se le ve con el respeto solemne que él quisiera y David quiera figurar en las grandes ligas de la política nacional, son lo que son y punto.

Zacatecas merece un destino mejor, el Senado por igual, la hipocresía de Ricardo y falsa rebeldía no lo hacen ideólogo. 

Hasta la próxima