No habrá dictadura en México

En opinión del Dr. Jesús Corona Osornio.- Por la cabeza de López Obrador, anduvo rondando el fantasma de la reelección o de la prolongación de su mandato. Así se lo hizo saber a su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, a Jesús Ramírez Cuevas, Epigmenio Ibarra y al General Secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval González.

Informó la fuente consultada que en esa reunión solo una voz dijo: no, no y no, y fue la esposa del presidente. Era una mañana de domingo, los hijos mayores del presidente no fueron convocados a ese desayuno, el presidente guardó silencio unos minutos.

Nadie más comento nada y luego López Obrador, miro a los invitados y comenzó a charlar de otros temas.

Así pasaron los meses hasta que Andrés Manuel comenzó el juego de las corcholatas, una puntada que iría cobrando fuerza y a la qué entre varios actores cercanos a Palacio Nacional, (PN), le dieron forma y López Obrador lo afinó, lo demás ya lo conocemos.

Nadie sabe los factores que motivaron a AMLO a no insistir en el tema de prolongar su mandato, no se sabe si fue su salud el ¡No! Contundente de su esposa.

Lo que sí es seguro, es que no fue por respeto a las leyes, de eso ni hablemos, lo cierto es que hoy por hoy, el presidente esta en la antesala de que una corcholata se le vaya.

Luis Marcelo Ebrard Casaubon, sabe desde hace muchos meses que la favorita es Claudia Sheinbaum Pardo. Marcelo, no ha querido facilitar las cosas para López Obrador, le ha puesto trabas, condiciones, ante todo Ebrard ha sido prudente, pero ya no más, se agotó la paciencia.

Nadie entiende el juego cuya perversidad llevo a incluir a tres personajes que nada tienen que hacer: Manuel Velazco Suárez, Fernández Noroña y Ricardo Monreal, los tres habrán de obtener botín.

Y la pregunta del millón de dólares, ¿Qué hará Ebrard?, si se queda en Morena, sería para la Secretaría de Gobernación, con libertad de acción, toma de decisiones, y proyección.

De no ser así, la única posibilidad sería ser candidato de Movimiento Ciudadano, (MC), con los riesgos de una traición de Dante Delgado, perder la elección y retirarse como un político fracasado.

Para Marcelo ningún escenario lo hace ganador, y todos ya sabemos que será la ex jefa de la capital, Claudia Sheinbaum, la ungida para ser la candidata, para Marcelo, el ostracismo, así paga AMLO la lealtad. 

Hasta la próxima