La corrupción se ha convertido en un deporte nacional bajo la franquicia de Morena, que lejos de ocultarla, se presume con lo hace la senadora Andrea Chávez, recibiendo camionetas de alta gama, blindada con valor de 4.5 millones de pesos, viajes en aeronaves del Ejército Mexicano y su asistencia asidua a restaurantes y hoteles gran turismo, todo con cargo al erario. 

Ernesto González Romo secretario de la Función Pública del estado de Zacatecas, tiene frente a sí, la oportunidad de demostrar que llegó al cargo para combatir la corrupción, o servir de tapadera. El que esto escribe, presentó una denuncia para que ser investigue, deslinde y finque responsabilidades en contra de quien o quienes resulten.

El día primero de enero del año 2014 (día inhábil), el entonces secretario de Administración del Gobierno de Zacatecas Le Roy Barragán Ocampo, hoy secretario de Turismo, autorizó y firmó un contrato de comodato de un inmueble propiedad del Gobierno de Zacatecas, en favor de C. María Luisa Contreras Santoyo apoderada legal del “Promotoriado Voluntario Pro Guardería Infantil de la Secretaría de Finanzas A. C.” .

La vigencia del contrato fue de 25 años forzosos para el Comodante y voluntario para el Comodatario, con renovación “automática” por otros 25 años para el Comodatario; en el caso que el Comodante decida unilateralmente cancelar el contrato, tendrá que pagar (Gobierno de Zacatecas), un penalización de el 10% del valor del inmueble por cada mes del tiempo pactado. 

Por vez primera en más de medio siglo de vida sé de la existencia de un contrato cuya vigencia es vitalicia, inextinguible, y la penalización por la terminación unilateral del mismo, si fuera el día de hoy, equivaldría a un pago del gobierno e Zacatecas por más de 400 millones de pesos, condiciones que Le Roy Barragán Ocampo exsecretario de Administración se pasó por el arco del triunfo.

Este “contrato” es un atraco en despoblado con cargo al erario del Gobierno de Zacatecas, en el que, el ente institucional queda indefenso ante la voracidad de los firmantes del contrato multicitado. El que esto suscribe, solicitó y obtuvo dos peritajes judiciales, que confirman el dolo, la ilegalidad del instrumento del caso que no ocupa, y los daños a las arcas del gobierno de Zacatecas. 

Este contrato huele, hiede a Jorge Miranda.