1o. Mayo nada que celebrar

“Cuando la estafa es enorme ya toma un nombre decente ”

Ramón Pérez de Ayala

Por Carlos Pavón Campos.- ¿Quién puede celebrar el Día del Trabajo cuando el Gobierno se queda con el 40 % de tu salario? Cuando de impuestos te bajan 40 pesos de cada 100 pesos que ganas. El mejor negocio del Gobierno somos los trabajadores; al despuntar el alba nos levantamos a trabajar para ellos, nos esforzamos para mantenerlos, nos cansamos para que ellos se levanten el cuello con cuanto programa social se les ocurra, que se pagan con nuestro esfuerzo diario.

No solo se trata del gobierno, en el sector obrero estamos para echar cuetes, y es que la mayoría de los trabajadores tienen agachones, payasos o mudos en lugar de líderes sindicales. 

Qué tan jodida está la cosa, que algunas organizaciones obreras nos convocaron el primero de mayo a una “marcha virtual”. Y no, no es broma. Más bien, es el nivel que tienen los cínicos representantes obreros que llevan años de omisos, calentando la silla, obedeciendo al sistema y sirviéndose de los trabajadores.

Ante esta realidad, lo digo claro: no hay nada que celebrar. Por el contrario, hay mucho por hacer. Según datos de la Secretaría del Trabajo, en México hay tres mil trescientas cuarenta y cinco agrupaciones sindicales, pero en términos reales, somos los único que trabajamos en defensa de la lucha obrera. Y no, no es soberbia, es trabajo. 

El Sindicato Minero Metalúrgico FRENTE es el único, de todas las organizaciones, en defender a nuestros agremiados y ampararnos ante el tope a las utilidades. Una ley que aprobaron los diputados de Morena, sus aliados y uno que otro ratero líder sindical, que ha intercambiado con el Gobierno los derechos obreros con tal de no ir a parar a la cárcel. Entre ellos, el imitador de minero.

Además de ampararnos, también acudimos a instancias internacionales, y la Organización Internacional del Trabajo ya admitió nuestra queja. El tope a las utilidades a 90 días será analizado por especialistas laborales ante los indicios de una grave violación a los derechos de los trabajadores de México, denuncia que ya algunos legisladores oportunistas ya se colgaron de nuestras denuncias.

Este Gobierno se ha dedicado a explotar y disminuir los ingresos de las familias trabajadoras. Y si no es así, ¿cómo se le llama a la expropiación de las Afores de adultos mayores de 70 años? ¿Al robo de 2.6 billones de pesos provenientes de las subcuentas de vivienda de 70 millones de trabajadores que aportaron el 5 por ciento de su salario mensual al INFONAVIT? 

La crisis que estamos viviendo en los sistemas de salud y la escasez de medicamentos nunca antes se había visto. Sin embargo, eso no importa: a los trabajadores nos llega el mismo descuento, nos atiendan o no.

El “Atole con el dedo” les sale bien. El Gobierno argumenta que han incrementado el salario mínimo, pero señores, dejen de engañar: son muy pocos los trabajadores que ganan un salario mínimo. Otorguen incrementos reales, disminuyan impuestos, dejen de gravar prestaciones, bajen la tasa de interés en los créditos de casa del INFONAVIT.

Una más: algunos vivales, como Napillo (Napoleón Gómez Urrutia), se la viven atacando a las empresas que nos dan empleo, que nos pagan nuestro salario sin pretextos, que nos dan seguridad social, incluso que negocian con nosotros prestaciones por encima de la ley, y aun así, aseguran que son las empresas las que abusan del trabajador. 

Veamos la realidad: ¿Quién nos está poniendo el pie en el cuello? ¿Las empresas que nos dan un salario con el que mantenemos a nuestra familia, el gobierno que nos quita el 40 % de nuestro salario, o los supuestos líderes sindicales rateros, como el imitador de minero que les robó a sus agremiados mil millones de pesos y que vive como millonario tras vaciar las cuentas?

Este es un llamado a la reflexión, a la acción…