López Obrador mesiánico delincuente…

Al Peje lo conozco desde que cubría la fuente política para el semanario Por Esto! dirigido por el periodista, director y amigo personal Mario Menéndez Rodríguez, quien me envió a dar cobertura de la toma de los pozos petroleros por Andrés Manuel López Obrador y ahí fue dónde le conocí por vez primera.


A este respecto, bastará una nota publicada por el diario La Crónica, la que ratifica su voraz ambición por el poder: El 9 de febrero de 1996, la Procuraduría General de la República (PGR) ejercitó acción penal contra el perredista Andrés Manuel López Obrador al encontrarlo presunto responsable por la comisión de los delitos: daño en propiedad ajena, sabotaje, conspiración contra el consumo y las riquezas nacionales, asociación delictuosa y oposición a que se ejecute alguna obra o trabajo público.  


La resistencia civil de López Obrador duró 12 días y provocó pérdidas superiores a los 63 millones de pesos, afirmó. Esas acciones de protesta organizadas por Andrés Manuel López Obrador, ex candidato perdedor del PRD a la gubernatura de Tabasco, las que iniciaron el 29 de enero de 1996, hasta el 9 de febrero del mismo año.


A través de cinco operativos conjuntos efectuados por agentes de la Policía Judicial Federal, de la Policía Federal de Caminos y Puertos, elementos del Ejército Nacional y uniformados de las policías estatales y municipales aglutinados en las llamadas Bases de Operaciones Mixtas (BOM), se logró la captura de 53 personas que fueron consignadas por los mismos cargos que López Obrador, con excepción de provocación de un delito y apología de los delitos.


Durante los operativos policiacos, López Obrador logró huir, pero otros 53 de sus seguidores y participantes en los actos de resistencia civil fueron capturados, consignados ante el juez e internados en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Villahermosa, Tabasco. 


López Obrador logró escapar junto con otros siete de los principales líderes del movimiento de protesta perredista: Héctor Muñoz Ramírez, Tomás Brito Lara, Adán Ruiz Martínez, Elman Córdoba Hernández, Vicente Oropeza Oropeza, Felipe Escudero Avila y Jorge Hernández Martínez. Y mientras medio centenar de sus seguidores se encontraban presos, López Obrador concedía entrevistas y recibía a los dirigentes estatales y municipales del PRD en su domicilio particular en el Fraccionamiento Galaxias, en Tabasco 2000.


Este es sólo un capítulo más de quien a través del chantaje, de la desmedida ambición de poder, de las eternas derrotas en las urnas, ha hecho de su vida una inexistente historia de “luchador social”, que nada tiene que ver con la persecución de cargos públicos. 


DOSSIER 


Sin candidatos a la alcaldía de la capital, Morena arrasa.- A diferencia de otros municipios, distritos y territorios, a pesar que la alianza Juntos Haremos Historia, (Morena, PT y PES), aún no terminan de repartirse el pastel, el presupuesto, los cargos, cuatro de cinco encuestas ordenadas por un PRI-Gobierno en pánico, dan una delantera del 2 X 1 en favor de Juntos Haremos Historia.


Los negativos de la pareja en unión libre PRI-VerdeEcologista superan el 51%, mientras que el pésimo, el primitivo despeño de la alcaldesa Judit Guerrero, convierte a la capital del estado en territorio prohibido para los alicaídos aliados, que por cierto no terminan de aliarse.


Por lo que respecta a la alianza Por México al Frente (PAN, PRD y MC), y su candidato el aún diputado Arturo López de Lara, quien por cierto, satanizado por ser familiar del gobernador, y de haber sido favorecido en posiciones privilegiadas al interior de la LXII Legislatura, los ubica en segundo sitio por lo menos 2 a 1 en el caso que hoy fueran las elecciones.


Pareciera que la desgracia se ensaña con la capital, y también con Zacatecas…