Nació muerta la Guardia Nacional

Se veía venir. A pesar de la mayoritaria morena aprobación de la Ley de Administración Pública que contempla la Secretaría de Seguridad Pública, nació muerta, aunque también sea aprobada en el Senado de la República por los legisladores que aún coordina Ricardo Monreal. 

Si en teoría esta súper secretaría se antoja una ocurrencia más de López Obrador y su equipo de asesores, en la práctica no solo tendrán que medicar más de 10 artículos de la Constitución Política de los Estados Unidos mexicanos, sino además la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, Ley Orgánica de la Armada de México, para la creación de la Guardia Nacional, contemplada para el Plan Nacional de Paz y Seguridad.

"Esta Guardia Nacional realizará labores de seguridad pública y además será auxiliar del Ministerio Público (…) la Guardia Nacional tendrá la posibilidad de hacer labores de seguridad y hacer detenciones cuando se presuma la comisión de un delito para presentar a las personas al Ministerio Público. Con la iniciativa que presentaremos el martes vamos a readecuar todo esto", aseveró  el coordinador de los diputados de Morena  Mario Delgado.

Entre el sinnúmero de interrogantes, de obstáculos, para llevar a cabo este locuaz ocurrencia de López Obrador y Alfonso Durazo, aquí dejo algunas: 

1.- Al integrar en la primera etapa elementos en activo de las Policías Militar, Naval y Federal, se tiene contemplado sean transferidos sin su grado de mando actual. La pregunta es: ¿perderán sus grados, haberes, y antigüedad? 

2.- Los elementos de estas corporaciones al perder sus condiciones contractuales que los vinculan al Ejército, Marina y Policía Federal, tendrán que ser objeto de la terminación de la relación labora actual. 

¿Serán liquidados conforme la ley vigente en la materia? o pasarán por encima de sus derechos laborales.

3.- Militares, Marinos y Policías Federales tienen formación exclusiva, diferente pues, debido a sus responsabilidades por tierra, cielo y mar. 

¿Partirán de cero en su nueva capacitación para formar parte de la Guardia Nacional? y ¿cuántos años llevará esta actividad? 

4.- La heterogénea fusión de estos elementos y mandos conlleva innecesarias y naturales fricciones, que seguramente desembocarán en resistencias a las nuevas cadenas de mando. 

¿Ya contemplaron esta situación? 

Estas interrogantes implican varios factores que no han dicho cómo los solventarán. Sino respetan los mandos y haberes de que gozan los elementos en mención, estarán violando sus derechos laborales, incluso humanos.

De igual manera, si optan por dar por terminada la relación laboral de cada uno de los elementos que migrarán a la Guardia Nacional. 

¿Tendrán idea de los cientos, quizás arriba de 1 mil millones de pesos que tendrán que sacar del erario para tales efectos?

Aún más, tendrán contemplado que el reclutamiento de miles de “ninis” que los cárteles enviarán no a uno, sino quizás cientos, miles de sus elementos sin historial delictivo registrado ante la instituciones de procuración de justicia y tribunales, facilitando con ello la infiltración de la Guardia Nacional, seguramente no. 

En este tenor, ¿los miles de “ninis” reclutados serán sometidos a los exámenes de confianza? ¿Sí? pues les tengo una mala noticia. La Policía Federal ha tardado más de 10 años, una década para someter a sus mandos y elementos a los exámenes de confianza, optando mejor por despedir a más 5 mil en forma discrecional al amañar la prueba del polígrafo que ha servido como justificación para sus injustos despidos.

Para finalizar, hoy López Obrador recurre al Ejército Mexicanos para asignarle tareas de seguridad pública, olvidando que si alguien ha agraviado a las fuerzas armadas es él. He aquí algunas perlas declarativas: 

El 1 de septiembre de 2006 dijo, en el Zócalo capitalino, a donde había convocado a sus seguidores, que el gobierno saliente de Fox y el entrante de Felipe Calderón “se pueden ir al diablo con sus instituciones… que se queden con sus tanquetas y sus soldados…

El 9 de febrero —de gira por Nayarit— mintió a sus seguidores y a la opinión pública cuando acusó sin una sola prueba que la Marina había masacrado a menores de edad en un operativo contra las bandas criminales que controlan la entidad.

En gira proselitista por Nueva York, AMLO acusó al Ejército mexicano de ser responsable de la masacre de “los 43” luego de que el padre de uno de los normalistas asesinados le reclamó su responsabilidad política al imponer a la familia Abarca en el gobierno de Iguala.

Más que suerte necesitará el futuro comandante supremo de las fuerzas armadas…