Ocho años durmieron “el sueño de los justos” sendas denuncias interpuestas ante la Procuraduría General de la República (PGR), posiblemente por ciudadanos zacatecanos, a través del sistema de denuncias anónimas, para que se investigara la compra de combustible robado por un grupo criminal por empresarios del ramo en Zacatecas.

Sin precisar quién “revivió” las denuncias del caso que nos ocupa, en estas se da cuenta de la presunta compra de miles y miles de litros adquiridos ilícitamente por los empresarios dedicados a este pingüe negocio, entre los que se hace mención de exfuncionarios de la administración de Miguel Alonso.

Las denuncias fueron turnadas a las oficinas de la Unidad de Inteligencia Financiera dependiente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), para su investigación y rastreo de inconsistencias en las declaraciones tributarias de cada empresa denunciada.

Llama la atención que en forma “coincidente” Zacatecas fuera incluido en las indagatorias de huachicoleo de entidades tales como: Puebla, Guanajuato, Michoacán, Morelos, Puebla, Veracruz y Tamaulipas entre otras, sin que en Zacatecas tuviera fuerte presencia de este grave ilícito.

Pronto veremos a personajes de la llamada clase política de Zacatecas ordenando a sus bogados obtengan amparos ante la Justicia Federal en aras de nos ser aprehendidos y vinculados a procesos por delitos ahora considerados como graves, insertos en el capítulo de delincuencia organizada.

El secuestro de los policías estatales en Durango más dudas que respuestas 

La versión oficial de la Secretaría de Seguridad Pública fue: Ismael Camberos Hernández, secretario de Seguridad Pública del Estado, informó que elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) de Zacatecas fueron retenidos por sus similares del Estado de Durango, por una presunta denuncia, relacionada con la no localización de una persona.

Camberos detalló que el hecho se registró en los límites entre Zacatecas y Durango, en el municipio de Juan Aldama, cuando 10 elementos estatales, a bordo de dos patrullas de la corporación zacatecana, realizaban recorridos de vigilancia y disuasión.

Al encontrarse en la zona limítrofe, los efectivos de la PEP fueron alcanzados por sus similares de la entidad vecina, quienes les pidieron que los acompañaran a territorio duranguense para atender lo relativo a una denuncia.

Sin embargo, precisó el Secretario de Seguridad Pública, los policías volvieron sin cargadores, cartuchos y radios Matra.

Versiones recogidas en el estado de Durango, apuntan a actividades “poco claras”, sospechosas pues, de los elementos zacatecanos, de los que se afirma fueron sometidos y neutralizados (torturados), por sus similares del estado de Durango, ante la posibilidad que estuvieran realizando custodia de transportes de estupefacientes con dirección a la frontera.

Será necesario que tanto Ismael Camberos Hernández, secretario de Seguridad Pública del Estado, y su homólogo del estado de Durango Francisco Javier Castrellon Garza, tendrán que informar con claridad, sin supuestos, en aras de evitar innecesarias especulaciones que incrementen el grado de escepticismo en las instituciones, pero también descartar la participación de los policías zacatecanos y duranguenses en la delincuencia organizada. 

Nos encontramos el próximo lunes…