Zacatecas a río revuelto…

por Horacio Zaldivar



Publicado en 9/29/2019 5:16:00 PM

A Javier Calzada, mi solidaridad ante la embestida gubernamental

Doctorado en explotación de sus congéneres y agandalle político, Napoleón Gómez Urrutia ve en Zacatecas una oportunidad de oro para seguir explotando para su beneficio, a los 2 mil trabajadores de la empresa GoldCorp, y de paso al gobierno estatal.

Apenas el 18 del mes y año en curso, el senador Napoleón Gómez Urrutia, manifestó su apoyo a los trabajadores de la mina de Peñasquito, en Zacatecas, y estimó necesario que las autoridades lleven a cabo una investigación del grupo de personas que se opone al funcionamiento de ésta.

Gómez Urrutia percibió la parálisis gubernamental generada por la ausencia de operadores con oficio político que respalden al gobernador para evitar que la minera cierre y se lleve consigo una derrama aproximadamente de casi 1 mil 800 millones de pesos anuales, dejando sin empleo a 2 mil 141 trabajadores de la mina Peñasquito y sus familias.

Montado en el tsunami de Morena, Gómez Urrutia pretende hacer más, y mejores negocios en Zacatecas, y desplazar al eterno mercenario, el también senador José Narro Céspedes, quien sigue haciendo de las suyas sin que hasta el momento haya alguien que le marque el alto a sus abusos y extorsiones. ¿será el fuero?

Al respecto viene a colación el artículo de Alberto Aguirre en la edición del 19 de septiembre del año en curso publicado en El Economista ¿Ingobernabilidad en Zacatecas?, en el que analiza la ruta crítica del gobierno estatal de la parálisis a la ingobernabilidad.

Después de hacer una crónica precisa del enésimo paro y boicot de transportistas a la Cervecería Modelo, encabezada por José Noel Martínez, operador de envasado, quien está al frente de un grupo de extrabajadores que demandan su reinstalación y esbirro de Narro Céspedes, comenta la entrevista del gobernador con la secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero.

El mandatario priista no llegó con las manos vacías a la cita. Además del cierre de la planta cervecera en La Calera, llevaba información sobre la injerencia de Narro Céspedes en el bloqueo a las instalaciones de la mina Peñasquito de GoldCorp.

En la “mesa de negociación” había tres temas: el cierre de la Mina Peñasquito, los conflictos sociales derivados del proyecto de la presa Milpillas, y la huelga en la cervecera de Calera. A esto habrá que sumar nuevo el escándalo provocado por el Patronato de la Feria Nacional de Zacatecas (FENAZA), y los turbios manejos en casi 60 millones a manos de una “asociación civil” creada a exprofeso.

Gómez Urrutia lo sabe, lo huele, que en Zacatecas hay una gran oportunidad de seguir acumulando inmensurable riqueza a costa del gobierno estatal, bajo el pretexto de defender la base laboral de la mina Peñasquito, cuyos trabajadores hoy subsisten, mañana quien sabe.

Cómo diría Carlos Salinas de Gortari “no se hagan bolas”. El gobierno de Zacatecas para dejar de ser rehén de Narro Céspedes, debe proponer a la empresa la terminación de las relaciones contractuales de los más de 2 mil trabajadores, finiquitar la relación contractual con el sindicato minero de Gómez Urrutia, y proponer una nueva contratación de la planta laboral, un nuevo sindicato, así cómo los servicios de transporte, para comenzar de cero.

A río revuelto… ganancia de Gómez Urrutia…